El Área de Protección del Centro Menesiano ZamoraJoven comienza a funcionar en el último trimestre del año 2004, con la apertura de dos dispositivos diferenciados, Residencia de Protección Juan María y Hogar de Acogida y Socialización, para dar una respuesta educativa a menores entre los 14 y los 18 años que se encuentran en situación de desprotección.
Los dos recursos de protección de que dispone el Centro están destinados de manera exclusiva a menores en situación de riesgo o desamparo, para los que se hayan acordado medidas o actuaciones de protección en las Secciones de Protección a la Infancia pertenecientes a la Gerencia de Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León, o en tanto que estas se adoptan.
Desde 2008 ofrecemos un Hogar de Transición a la Vida Adulta para jóvenes de 18 a 21 años que no cuenten con recursos personales o familiares para hacer frente a la vida adulta de forma satisfactoria.
La Residencia de Protección Juan María, cuenta con 12 plazas y se configura como un recurso social y educativo dedicado al acogimiento residencial y destinado a la atención de aquellos menores con medidas o actuaciones protectoras que, no pudiendo permanecer en sus hogares, precisan de un contexto de convivencia sustitutivo al de su familia.
Como centro de protección a la infancia asume:
El Hogar Menesiano, cuenta con 6 plazas y está destinado a la atención de menores en situación de crisis familiar o de grave riesgo de desprotección, siendo esta una actuación inmediata o de urgencia.
Está también disponible para menores con problemas de socialización, inadaptación o desajuste social, llevando a cabo una intervención de carácter intensivo, compensatorio e integral, para promover en ellos la modificación de actitudes y la adquisición de normas de convivencia que favorezcan su proceso de socialización.
Puesto en marcha en el año 2008 para dar cobertura social a jóvenes entre 18 y 21 años que por diversas circunstancias no cuenten con recursos personales o familiares para hacer frente a la vida adulta de forma satisfactoria.
El programa, que ofrece 4 plazas, surge de la necesidad de ofrecer a los jóvenes que terminan en el sistema de protección un marco de vida que les permita continuar el proceso de preparación a la vida independiente en aspectos físicos, formativos, afectivos, conductuales,… con tiempos de convivencia, estudio o trabajo, ocio y tiempo libre, relaciones y amistad.
Además acoge a otros jóvenes que, por sus condiciones socio-familiares, no cuentan con posibilidades reales de incorporarse de manera autónoma a la sociedad, si no cuentan con un recurso que les apoye.